Terapia de Adultos

s la terapia de pareja la solución a los problemas de comunicación

Mi trabajo en la terapia de adultos consiste en ayudarle a comprender lo que le está ocurriendo, colaborando en todo momento con usted, con el objeto de superar las dificultades, solucionar los problemas que surgen a lo largo de nuestra vida y proporcionarle los recursos necesarios para aprender a solucionarlos por sí mismo en el futuro.

Los principales trastornos que el gabinete de psicología atiende son los siguientes:

    • DEPRESIÓN
    • ANSIEDAD
    • ATAQUES DE PÁNICO
    • OBSESIONES Y MANÍAS
    • CONTROL DE ESTRÉS
    • DUELO TRAS UNA PÉRDIDA
    • FOBIAS
    • HABILIDADES SOCIALES Y ASERTIVIDAD
    • TRASTORNOS DE LA ALIMENTACIÓN: ANOREXIA, BULIMIA, OBESIDAD E INGESTA COMPULSIVA.
    • INSOMNIO
    • DEJAR DE FUMAR
    • TÉCNICAS DE BÚSQUEDA DE EMPLEO
    • ELABORACIÓN DE INFORMES PSICOLÓGICOS

1. DEPRESIÓN
La depresión ha llegado a situarse en los últimos años entre los trastornos psicológicos más frecuentes en la población general y uno de los más incapacitantes. Además, la depresión no siempre aparece de forma aislada, sino que suele asociarse a otros trastornos, especialmente a los trastornos de ansiedad.

La depresión se produce cuando sentimientos de profunda tristeza o desesperación duran como mínimo dos meses o más y cuando interfieren con las actividades de la vida cotidiana como trabajar o incluso comer y dormir. Las personas deprimidas tienden a sentirse abrumadas, agotadas, indefensas y sin esperanzas y a culparse por tener estos sentimientos.

Las personas con depresión pueden dejar de participar en ciertas actividades cotidianas, retrayéndose de familiares y amigos. El cansancio, las ideas de muerte y falta de esperanza en el futuro, las dificultades de concentración y el aumento o disminución del peso, son también síntomas que suelen acompañar a la Depresión.

En la primera consulta la psicóloga llevará a cabo la evaluación de los síntomas de su depresión: estudiaremos qué síntomas padece, la frecuencia de los mismos, el tiempo que lleva padeciendo esas manifestaciones depresivas y la intensidad con que está sufriendo su depresión.

En el tratamiento de la enfermedad utilizo la terapia cognitivo conductual n. Algunos de nuestros pacientes quieren saber si el uso de fármacos es compatible con nuestra terapia: El tratamiento de la depresión puede realizarse solo con fármacos, solo con psicoterapia o con una combinación de ambas. Los estudios científicos demuestran que para prevenir recaídas la terapia psicológica es mucho más eficaz que usar solamente medicación. Las investigaciones muestran que las personas que realizan terapia psicológica reducen a más de la mitad el riesgo de una recaída por lo que conseguimos con ella que nuestros pacientes además de mejorar más rápidamente de su depresión, reduzcan mucho el riesgo de padecer en el futuro un nuevo episodio depresivo.

En las primeras fases del tratamiento se suelen emplear técnicas conductuales a fin de acercarse al nivel de funcionamiento que tenía el paciente antes de la depresión. Con las técnicas cognitivas buscamos corregir aquellos pensamientos alterados por su carga negativa o pesimista que originan la depresión. Se trataría de localizar estos pensamientos y sustituirlos por otros más reales y positivos.

2. ANSIEDAD
La ansiedad es una emoción más junto al resto de emociones que experimentamos de manera cotidiana, como la alegría, tristeza, miedo, ira, sorpresa…Se experimenta como un estado emocional displacentero que se produce ante determinadas situaciones que pensamos pueden ser peligrosas para nuestro equilibrio psicológico, expectativas de éxito, autoestima y supervivencia. En situaciones normales, es un factor de impulso positivo que mejora nuestro rendimiento y aumenta nuestra atención y nivel de alerta ante, por ejemplo, un examen importante, una entrevista de trabajo o ante una emergencia vital. Sin embargo cuando la ansiedad sobrepasa un cierto nivel, se convierte en un grave problema porque perjudica nuestro bienestar físico y psicológico e interfiere en nuestras actividades diarias. En lugar de ser un impulso y una ayuda para nuestra adaptación se convierte en un obstáculo que limita nuestra capacidad de elección y nuestras acciones.

Aproximadamente entre un 15% y un 20% de la población padece o va a padecer algún problema relacionado con la ansiedad que necesite tratamiento, pues su mejora espontánea es muy improbable. La mayoría de las personas con problemas de ansiedad que no acuden a tratamiento tienden a padecer con el tiempo síntomas mayores y más intensos, extendiéndose a más situaciones y cronificándose. La simple voluntad de la persona para vencer estos síntomas suele ser la mayor parte de las veces insuficiente, necesitando acudir al tratamiento cuando los síntomas de llevan ya tiempo instaurados.

Los trastornos de ansiedad que en mi clínica se tratan son los siguientes:

    • Fobias y miedos
    • Fobia social
    • Ataques de pánico y trastorno de pánico.
    • Agorafobia.
    • Trastorno de ansiedad generalizado.
    • Trastorno por estrés postraumático.
    • Trastorno obsesivo-compulsivo.

3. ESTRÉS
El estrés es un proceso psicológico que aparecen ante situaciones que interpretamos que suponen una amenaza o reto y que nos exigen un esfuerzo. Si nosotros nos sentimos capaces de afrontar dichas situaciones, se convierte en una respuesta adaptativa en la que ponemos en marcha todos nuestros recursos y habilidades de afrontamiento. Pero si consideramos que no tenemos los recursos suficientes para afrontarlas, transcurrido un tiempo, el organismo se agota, apareciendo entonces los problemas de salud, tanto de índole física (úlceras, cardiopatías, problemas musculares…como psicológica (ansiedad, depresión…).

4. TRASTORNOS DE LA ALIMENTACION
Los trastornos de la conducta alimentaria son trastornos mentales que implican un comportamiento anormal frente a la ingesta de alimentos y una obsesión por el control de peso. Sus causas son de origen biológico, psicológico, familiar y sociocultural y provocan graves consecuencias tanto en la salud física como mental de la persona que los padece.

Los trastornos más conocidos y de mayor prevalencia son la Anorexia nerviosa y la Bulimia nerviosa, pero también existen otros como el trastorno por atracón, la ortorexia (obsesión por la comida sana) y la vigorexia (obsesión por el ejercicio físico).
Son enfermedades graves, pero se pueden curar si se realiza un tratamiento multidisciplinar compuesto por médicos y psicólogos especializados. Son tratamientos largos y complejos, porque su principal característica es la falta de conciencia de enfermedad por parte de la persona afectada, es decir, no es capaz de darse cuenta de que padece el trastorno ni de la necesidad de su tratamiento, por lo que la adherencia al mismo es baja. Esta característica hace que el papel de la familia sea especialmente importante para que la persona afectada reciba el tratamiento aunque no colabore en ello.

La preocupación por el peso y las dietas se ha convertido en el modelo a seguir por la sociedad occidental, donde la delgadez como ideal de belleza ha propiciado que la imagen personal no sea sólo una cuestión de estética, sino sinónimo de éxito y autocontrol personal.

La detección precoz del trastorno, simplifica su tratamiento, mientras que si éste se cronifica, hace muy difícil su curación. Cada caso deberá ser evaluado teniendo en cuenta las características del paciente y en función de las causas y factores que han provocado su aparición y que actúan en su mantenimiento.

5. INSOMNIO
El insomnio se define como la dificultad para iniciar o mantener el sueño y puede manifestarse como dificultad para conciliar el sueño (insomnio inicial), despertarse frecuente durante la noche o despertarse muy temprano por la mañana, antes de lo planeado (insomnio terminal).

Según la duración del problema también puede dividirse en insomnio agudo, si dura menos de 4 semanas, subagudo cuando tiene una duración de entre 4 semanas y 6 meses, o crónico si dura más de 6 meses.

La queja más frecuente asociada al insomnio es la somnolencia diurna, baja concentración e incapacidad para sentirse activo durante el día.

Puede deberse a muchas causas, tales como el estrés, ansiedad, depresión, ciertos medicamentos…

Es muy habitual el prescribir fármacos para solucionarlo, sin embargo, dicho tratamiento debe evitarse, sobre todo, a largo plazo, por el elevado riesgo de dependencia del medicamento. Se hace necesario entonces el uso de técnicas psicológicas, fundamentalmente la terapia conductual y la cognitivo-conductual.

Es también importante enseñar al cliente medidas de higiene del sueño y un cambio de hábitos.

De todos modos no debemos olvidar que se aprende a dormir bien desde la infancia y que un niño con malos hábitos del sueño será un adulto con problemas de insomnio.

6. DEJAR DE FUMAR
Todas las personas fumadoras, tanto las que ya padecen algún trastorno de salud, como los que creen “estar sanos”, deberían recapacitar sobre las consecuencias que este hábito tiene sobre su vida, ya que no solo es un riesgo para nuestro bienestar y salud futuras, sino que deteriora nuestra calidad de vida cada día y nos causa múltiples síntomas de malestar, que van desde un deterioro estético (olor, dientes amarillos…) hasta una inflamación e irritación crónica de las mucosas, dolores de cabeza o la destrucción de vitaminas y minerales indispensables para el buen funcionamiento de nuestro organismo.

El tabaco es el responsable de 9 de cada 10 casos de graves enfermedades respiratorias crónicas y cánceres de pulmón y, de casi la mitad de las enfermedades cardiocirculatorias mata a uno de cada dos fumadores de forma prematura.

No debemos de pensarlo más, el dejar de fumar será una de las mejores decisiones que podremos tomar y no solo depende de nuestra voluntad, sino que en muchas ocasiones la alta dependencia física y psicológica que el tabaco provoca en nosotros, hace necesaria una ayuda psicológica que nos enseñe a superar esta adicción. NO será un signo de debilidad, sino de decisión y fortaleza.

Tarifas y precios por sesión

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